Viernes, 10 de enero, 2020
En noviembre y diciembre de 2019, el aire en Punyab, la provincia más poblada de Pakistán, era tan tóxico que la salud y la vida de las personas corrieron grave peligro
El primer ministro de Pakistán, Imran Khan, celebró una conferencia de prensa el 30 de noviembre exclusivamente para abordar la crisis de contaminación atmosférica que tuvo lugar en Punyab durante 2019. El primer ministro aceptó que el esmog o niebla urbana era un “asesino silencioso” y dio a conocer un plan que sigue las recomendaciones de expertos para abordar la contaminación tóxica del aire. Acogemos con satisfacción la capacidad de respuesta del gobierno de Pakistán y su voluntad de abordar la crisis. Observaremos atentamente la situación para ver cómo desarrolla su compromiso de limpiar el aire.
No se requiere ninguna otra acción. Muchas gracias a todas las personas que enviaron llamamientos.
En noviembre y diciembre de 2019, el aire en Punyab, la provincia más poblada de Pakistán, era tan tóxico que la salud y la vida de las personas corrieron grave peligro. Las escuelas tuvieron que cerrar, aumentaron las enfermedades respiratorias y llegó incluso a resultar difícil respirar. El 21 de noviembre a las 13.00, el índice de calidad del aire en Lahore, capital de Punyab, llegó a 598, superando con creces el umbral de “peligrosidad”, que comienza en 300. Tanto ese día como otros, en Lahore se registraron los peores niveles de contaminación del aire del mundo.
En respuesta a la crisis, Amnistía Internacional emitió una Acción Urgente en favor de los habitantes de Lahore, intentando movilizar a sus simpatizantes en todo el mundo para que hicieran campaña en favor de toda la población debido al peligroso esmog o niebla urbana que envolvía la segunda mayor urbe de Pakistán. La campaña recibió cobertura mundial y llegó a los titulares de The New York Times, Time, BBC, Newsweek, The Washington Post y los servicios de noticias de los canales informativos paquistaníes, y los medios de comunicación recriminaron al gobierno del país que no hubiera dado prioridad a la crisis de salud pública provocada por el esmog.
El 30 de noviembre, nueve días después de la publicación de la Acción Urgente, el primer ministro Imran Khan expuso en una conferencia de prensa las líneas maestras de un plan para resolver el problema del esmog y subrayó las consecuencias letales de no hacer frente a la crisis. Es la primera vez que un primer ministro convoca una conferencia de prensa únicamente para hablar sobre la contaminación atmosférica, lo cual demuestra que la campaña hizo llegar la cuestión hasta las más altas esferas del gobierno.
Además de la respuesta del gobierno paquistaní, el ministro federal de Cambio Climático, Malik Amin Aslam, escribió a Amnistía Internacional: “Les garantizo que nuestro Ministerio está comprometido a desempeñar su papel para que el futuro de Pakistán sea más limpio, verde y sostenible, con especial atención al problema creciente de la contaminación del aire y el cambio climático.
Si bien los compromisos contraídos por las autoridades para resolver la crisis del esmog han encontrado una calurosa acogida, el aire de Punyab sigue en niveles que oscilan entre insalubres y muy insalubres. Vigilaremos de cerca la situación para asegurarnos de que el gobierno de Pakistán cumple su compromiso de limpiar el aire.
Nombre y género gramatical preferido: Población de Lahore (no aplicable)
Segunda y última actualización de la au 153/19
Enlace a la AU anterior: https://www.amnesty.org/es/documents/asa33/1370/2019/es/