Miércoles, 15 de julio, 2020
Ante el homicidio de nueve manifestantes y las heridas causadas al menos a 17 más por un grupo miliciano armado afiliado a las fuerzas de seguridad en Fata Borno, Darfur Septentrional, el 13 de julio, Deprose Muchena, director regional de Amnistía Internacional para África Oriental y Austral, ha declarado:
“La población de Darfur tiene derecho a que se oigan sus voces y a poder protestar pacíficamente. Las autoridades de Sudán deben revisar inmediatamente sus operaciones de seguridad en Darfur para garantizar que protegen efectivamente a la población civil frente a estos ataques deliberados y no provocados de milicias armadas.
También deben realizar sin dilación investigaciones efectivas e imparciales sobre los homicidios de manifestantes y todas las demás denuncias de violaciones graves de derechos humanos cometidas por el grupo miliciano. Deben acabar con la impunidad de la que gozan las fuerzas de seguridad y los grupos armados que, desde hace 17 años, infligen muerte, dolor y sufrimiento a la población de Darfur. Ya es hora de hacer que los presuntos responsables penales de estos ataques comparezcan ante la justicia en juicios justos, así como las fuerzas de seguridad asignadas a la zona bajo cuya vigilancia siguen cometiéndose los ataques.
Las autoridades deben garantizar asimismo que las organizaciones humanitarias tienen acceso seguro y sin restricciones a la zona para entregar ayuda humanitaria a las personas internamente desplazadas cuyos hogares fueron saqueados e incendiados por la milicia armada”.
Información complementaria
El 6 de julio comenzaron las protestas en Fata Borno para exigir mejor seguridad, la protección de sus cosechas y el cese de los funcionarios afiliados al régimen del expresidente Omar al Bashir.
La población de Darfur sufre ataques mortales de milicias armadas y está atrapada en medio de los combates entre las milicias armadas y las fuerzas gubernamentales. Desde 2003, la violencia ha causado la muerte de más de 300.000 personas y el desplazamiento de más de dos millones.
La Corte Penal Internacional ha emitido órdenes de arresto para cuatro altos cargos del gobierno sudanés entre los que figura el ex presidente Omar al Bashir por crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad y genocidio contra la población de Darfur.