Jueves, 12 de marzo, 2020
A Server Mustafayev, defensor crimeo de los derechos humanos que en la actualidad está siendo juzgado ante un tribunal militar ruso, se le está negando una atención médica adecuada. Sufre fiebre alta y una infección viral de las vías respiratorias, al igual que otros dos hombres acusados en la misma causa. A pesar de su estado de salud, se les está obligando a asistir a largas vistas judiciales sin ofrecerles comida ni agua.
Actúen: Redacten su propio llamamiento o utilicen la siguiente carta modelo
Fiscal Militar / Military Prosecutor Sergei Kolomiyets
Southern Military Region
Pushkinskaya Street 72a
Rostov-on-Don 344002
Federación Rusa
Fax: +7 (863) 2827968
Correo-e: vp_uvo@gvp.rsnet.ru
CC: priemnaya@gvp.rsnet.ru
Señor fiscal militar:
Le escribo en relación con el caso de Server Mustafayev, defensor crimeo de los derechos humanos que está siendo juzgado ante Tribunal Militar de la Región Meridional y podría tener que cumplir hasta 25 años de prisión si es declarado culpable. Server Mustafayev y otros dos hombres acusados en la misma causa, Memet Belyalov y Seyran Saliyev, han desarrollado recientemente síntomas propios de una infección viral de las vías respiratorias. A pesar de ello, han sido trasladados al juzgado y obligados a permanecer varias horas allí, enfermos y sin comida ni agua, durante el transcurso de la vista. Se les está negando una atención médica adecuada.
El 3 de marzo Server Mustafayev se sintió enfermo durante la audiencia judicial, pero el tribunal rechazó sus reiteradas peticiones de atención médica. El 4 de marzo tenía fiebre alta y síntomas de infección viral de las vías respiratorias, e informó de ello a la administración de la prisión. Le pusieron una inyección para bajarle la fiebre y lo trasladaron al juzgado. Allí continuó encontrándose mal, pero sus peticiones de que se pospusiera la vista fueron rechazadas. Además, ni a él ni a los demás hombres encausados junto a él les dieron comida ni agua durante la vista, que se prolongó más de nueve horas.
No proporcionar la asistencia médica adecuada a las personas presas puede suponer una violación de la prohibición absoluta de la tortura y otros tratos crueles, inhumanos y degradantes que establece, entre otros, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (artículo 7); esto es especialmente cierto si las autoridades niegan dicha asistencia de forma intencionada.
Server Mustafayev es fundador y coordinador del movimiento de base Solidaridad Crimea, cuyo propósito es proporcionar solidaridad y apoyo a las víctimas de la persecución política y religiosa que sucedió a la ocupación rusa de Crimea. Los cargos contra él son falsos y se han presentado como medida de represalia por su labor de defensa de los derechos humanos. Es preso de conciencia y debe ser puesto en libertad de inmediato y sin condiciones.
Lo insto a adoptar todas las medidas necesarias para garantizar que:
- Server Mustafayev es liberado de inmediato y sin condiciones y se retiran todos los cargos en su contra;
- Mientras tanto, se le proporciona asistencia médica adecuada a él y a los hombres encausados junto a él, de conformidad con las normas internacionales de derechos humanos y, en particular, con las Reglas Mínimas de la ONU para el Tratamiento de los Reclusos (Reglas Mandela).
Atentamente,
[NOMBRE]
Información complementaria
Quienes se han opuesto a la ocupación y anexión ilegal de la península de Crimea por parte de Rusia, y a las violaciones de derechos humanos que llevan cometiéndose en ella desde 2014, han sufrido acoso, procesamiento por cargos falsos y desaparición forzada. Ningún observador internacional de derechos humanos tiene acceso a Crimea, y los medios de comunicación independientes han sido prohibidos o clausurados.
Server Mustafayev es fundador y coordinador del movimiento de base Solidaridad Crimea en la Crimea ocupada por Rusia. Este movimiento nació el 9 de abril de 2016 en respuesta a la persecución política y religiosa que sufrían tanto la población tártara de Crimea como otras personas a manos de las autoridades rusas. El movimiento integra activistas, profesionales del derecho y familiares de personas detenidas y procesadas, para garantizar su acceso a asistencia letrada, ayudas económicas y médicas y otros servicios vitales. En ausencia de una prensa libre, y ante la persecución de cualquier voz disidente en Crimea desde la anexión ilegal rusa en 2014, el movimiento intenta también sensibilizar sobre las constantes violaciones de derechos humanos que tienen lugar en la península.
El 21 de mayo de 2018, miembros del Servicio Federal de Seguridad ruso registraron el domicilio de Server Mustafayev en Bakhchisaray, localidad del sur de Crimea. Después se llevaron a Mustafayev a su cuartel general de Simferopol, capital de Crimea, y lo acusaron de “pertenencia a organización terrorista” (segundo apartado del artículo 205.5 del Código Penal ruso) por sus presuntos vínculos con Hizb ut Tahrir, organización islámica internacional prohibida en Rusia por “terrorismo”, pero legal en Ucrania. Sus miembros no han participado en actos violentos ni han hecho apología de la violencia en Crimea, ni antes ni después de la ocupación de la península en 2014. Sin embargo, las autoridades rusas han esgrimido la presunta pertenencia a Hizb ut Tahrir como excusa para procesar a voces disidentes, entre ellas el defensor de derechos humanos Emir-Usein Kuku.
El 22 de mayo, el tribunal de Simferopol dictó una orden de prisión preventiva contra Server Mustafayev que, desde entonces, ha sido renovada repetidamente. Su abogada ha asegurado a Amnistía Internacional que la única prueba que existe en su contra es una grabación de voz en la que formula una pregunta durante un coloquio religioso que tuvo lugar en la mezquita de Bakhchisaray el 2 de diciembre de 2016. En concreto, Mustafayev pregunta si es posible amar a una persona “en general” pero odiarla por una acción en particular, y después desarrolla su punto de vista sin decir nada que pueda considerarse incitación al odio o a la violencia. Al coloquio, abiertamente anunciado con antelación, asistieron unas 70 personas más. Sin embargo, la investigación concluyó que Server Mustafayev había participado en una reunión secreta de Hizb ut Tahrir. El 22 de febrero, Server Mustafayev fue acusado asimismo de “conspirar para hacerse con el poder por medios violentos” (artículo 278 del Código Penal ruso). La investigación ha sido incapaz de presentar prueba alguna de delitos internacionalmente reconocibles. Server Mustafayev niega haber participado en actividades “terroristas” de ninguna clase. Los cargos que se le imputan pueden acarrear hasta 25 años de prisión.
En su misma causa judicial hay otros siete hombres acusados de terrorismo. Marlen Asanov, Timur Ibragimov, Server Zekeryayev, Seyran Saliyev, Ernest Ametov y Memet Belyalov fueron detenidos el 11 de octubre de 2017 y Edem Smailov, el 21 de mayo de 2018. Todos han sido acusados en función de grabaciones que prueban su asistencia al coloquio de diciembre de 2016 en la mezquita de Bakhchisaray, así como a otras reuniones.
La primera vista judicial del caso de Server Mustafayev estaba prevista para el 17 de septiembre de 2019 ante el Tribunal Militar del Distrito del Cáucaso Septentrional, en Rostov del Don (suroeste de Rusia). El 12 de septiembre fue trasladado de Crimea a Rusia, pero no a Rostov del Don sino a la ciudad de Krasnodar, en cuyo centro de detención SIZO-1 fue recluido el 13 de septiembre. Al trasladar a presos desde un territorio ocupado hasta Rusia, juzgarlos en aplicación de la legislación rusa y hacerlos comparecer en juicio ante un tribunal militar, las autoridades rusas están violando tanto el derecho internacional humanitario como el derecho internacional de los derechos humanos.
Pueden escribir llamamientos en: Ruso, inglés
También pueden escribir en su propio idioma.
Envíen llamamientos lo antes posible y no más tarde del: 17 de abril de 2020
Consulten con la oficina de Amnistía en su país si van a enviar llamamientos después de la fecha límite.
Nombre y género gramatical preferido: Server Mustafayev (masculino)
Enlace a la AU anterior: https://www.amnesty.org/es/documents/eur46/1470/2019/es/