Lunes, 29 de abril, 2019
Esperamos que esta decisión marque un paso importante hacia la justicia para los Ogoni Nueve, dijo Mark Dummett, Director de Negocios y Derechos Humanos de Amnistía Internacional
Un tribunal neerlandés dictará sentencia esta semana (miércoles 1 de mayo) sobre una causa histórica contra Shell en la que el gigante petrolero está acusado de instigar toda una serie de espantosas violaciones de derechos humanos cometidas por el gobierno nigeriano contra el pueblo ogoni.
Esther Kiobel, Victoria Bera, Blessing Eawo y Charity Levula demandaron a Shell por el papel que afirman desempeñó en el arresto ilegítimo, la detención y la ejecución de sus respectivos esposos por el ejército nigeriano tras una oleada de represión brutal de las protestas ogonis contra la devastadora contaminación de la región causada por Shell en la década de 1990.
“Esperamos que esta decisión represente un importante paso hacia la justicia para los nueve ogonis”, dijo Mark Dummett, director de Empresas y Derechos Humanos en Amnistía Internacional.
“Estas mujeres creen que sus esposos estarían hoy vivos aún de no haber sido por el implacable afán de lucro de Shell, que alentó la sangrienta represión del gobierno nigeriano contra las personas que protestaban aun a sabiendas del coste humano.
“Pese a la gran cantidad de pruebas contra Shell, la empresa ha logrado eludir la justicia durante años. Esta sentencia podría tener una enorme importancia para las personas que, en todo el mundo, sufren debido a la codicia y la temeridad de empresas globales, y luchan para hacer que estas rindan cuentas de sus actos”.
Esther Kiobel y Victoria Bera asistirán a la vista en el Tribunal de Distrito de La Haya, acompañadas de representantes de Amnistía Internacional.
Llevar ante los tribunales a una poderosa empresa multinacional por los daños que ha causado en otro país es un proceso sumamente prolongado. Esther Kiobel presentó primero una demanda contra Shell en Nueva York en 2002, pero en 2013 la Corte Suprema estadounidense resolvió que Estados Unidos carecía de jurisdicción, por lo que los tribunales de ese país nunca examinaron el fondo de las acusaciones contra Shell.
Los nueve ogonis
Amnistía Internacional ha documentado de forma independiente el papel desempeñado por Shell en los homicidios, violaciones y torturas perpetrados por el gobierno nigeriano para aplastar las protestas.
Barinem Kiobel, Baribor Bera, Nordu Eawo y Paul Levula fueron ahorcados en 1995 tras un juicio manifiestamente injusto. Sus viudas exigen ahora una indemnización y una disculpa pública de Shell por el papel que desempeñó la empresa en estos hechos. Junto con ellos, fueron ejecutados otros cinco hombres, entre los que figuraba el líder de las protestas y escritor Ken Saro-Wiwa. Se los conoce colectivamente como los nueve ogonis.
Las cuatro demandantes acusan a Shell de desempeñar un papel decisivo en el arresto ilegítimo y la detención de sus esposos, y en la violación de la integridad personal de estos y de sus derechos a un juicio justo y a la vida, así como de la violación del derecho a la vida familiar de las propias demandantes. Amnistía Internacional ayudó al equipo jurídico de Esther Kiobel a presentar la demanda en los Países Bajos en 2017 y detalló el papel de Shell en las detenciones y ejecuciones en el informe titulado In The Dock. Las demandantes también piden al tribunal que ordene a Shell la entrega de más de 100.000 documentos internos marcados como confidenciales por la empresa durante las actuaciones judiciales en Estados Unidos entre 2002 y 2013, que son cruciales para el procedimiento.