Jueves, 26 de julio, 2018
"Unas 300 personas han muerto desde que comenzó la represión estatal en abril. Amnistía Internacional quiere recordar que todos los Estados pueden ejercer la jurisdicción sobre las personas sospechosas de ser penalmente responsables de los delitos que se están cometiendo en Nicaragua", declaró Jurema Werneck, directora ejecutiva de Amnistía Internacional Brasil
En respuesta a la muerte por disparos de la estudiante brasileña de medicina Raynéia Gabrielle Lima en Nicaragua, cometido el 23 de julio, Jurema Werneck, directora ejecutiva de Amnistía Internacional Brasil, ha manifestado:
“La represión de la población civil y la violación del derecho a la protesta en Nicaragua son inaceptables. El homicidio de la ciudadana brasileña Raynéia Gabrielle Lima tuvo lugar en un momento en que la represión violenta se está intensificando en todo el país. Condenamos las violaciones de derechos humanos cometidas por la policía nicaragüense y por grupos armados progubernamentales.”
“Unas 300 personas han muerto desde que comenzó la represión estatal en abril. Amnistía Internacional quiere recordar que todos los Estados pueden ejercer la jurisdicción sobre las personas sospechosas de ser penalmente responsables de los delitos que se están cometiendo en Nicaragua. Estos homicidios no pueden quedar impunes”, ha añadido Erika Guevara Rosas, directora para las Américas de Amnistía Internacional.