“Este es un momento en que el mayor grupo político europeo debe pronunciarse, no se puede mantener al margen mientras uno de sus miembros, el partido gobernante en Hungría, Fidesz, adopta leyes que criminalizan el trabajo legítimo y fundamental de los grupos de la sociedad civil y los profesionales del derecho en el país”, ha declarado Iverna McGowan, directora de la Oficina de Amnistía Internacional ante las Instituciones Europeas

Los líderes del Partido Popular Europeo (PPE) deben utilizar las reuniones cruciales que celebrarán la semana próxima en Varsovia y Múnich para responder urgentemente a los draconianos ataques de Hungría contra los derechos humanos, ha afirmado Amnistía Internacional.

Las reuniones del Partido Popular Europeo coinciden con el debate en el Parlamento húngaro sobre la nueva y controvertida legislación en materia de inmigración dirigida contra ONG y personas defensoras de los derechos humanos.

“Este es un momento en que el mayor grupo político europeo debe pronunciarse, no se puede mantener al margen mientras uno de sus miembros, el partido gobernante en Hungría, Fidesz, adopta leyes que criminalizan el trabajo legítimo y fundamental de los grupos de la sociedad civil y los profesionales del derecho en el país”, ha declarado Iverna McGowan, directora de la Oficina de Amnistía Internacional ante las Instituciones Europeas.

“De aprobarse, la legislación propuesta por el gobierno húngaro atentarían contra los principios más fundamentales de la normativa de la Unión Europea en materia de derechos humanos, por no hablar de los propios valores declarados del PPE.”

Un paquete de leyes punitivas presentadas esta semana en el Parlamento húngaro pretende criminalizar el trabajo legítimo relacionado con la migración que realizan activistas y ONG.

Los proyectos de ley presentados, conocidos como el paquete “Stop Soros”, en referencia al multimillonario y filántropo húngaro-estadounidense, están dirigidos específicamente contra grupos que, según el gobierno, apoyan a las personas refugiadas y migrantes.

Las propuestas se producen en un momento en que el Parlamento Europeo está sometiendo a examen la pertenencia de Hungría a la UE por su cada vez más grave historial en materia de derechos.

Los nuevos textos legislativos, varían respecto de las dos versiones anteriores presentadas por el gobierno desde enero de 2018. Se ha introducido el delito de “facilitación de la inmigración ilegal”, en un cambio aparente para perseguir a las personas en lugar de a las organizaciones. Sin embargo, el riesgo para las organizaciones continúa ya que las “entidades legales” que participan en actividades que “facilitan la inmigración ilegal” también pueden ser “examinadas” y sancionadas en aplicación de la legislación propuesta.

Amnistía Internacional Hungría podría enfrentarse a sanciones, y el personal y las personas voluntarias podrían ser perseguidas, e incluso encarceladas, por realizar labores legítimas como defensores y defensoras de los derechos humanos.

“El Parlamento húngaro debe votar en contra de este ataque descarado contra los activistas, las ONG y quienes buscan un lugar seguro frente a la persecución”, ha afirmado Iverna McGowan.

“Al mismo tiempo, el PPE debe utilizar toda su influencia, no sólo para detener este proyecto de ley, sino también para garantizar que se revierten ataques previos contra la sociedad civil, como las leyes contra las ONG aprobadas en 2017, y que se restablece un entorno seguro y constructivo para la sociedad civil en Hungría.”

El lunes 4 de junio, como símbolo del apoyo en todo el mundo a la sociedad civil de Hungría, Amnistía Internacional colocará un globo gigante en forma de corazón en el exterior del Parlamento Húngaro en Budapest y repartirá folletos a los miembros del Parlamento recién elegidos con mensajes de solidaridad recabados de más de 22.000 personas en 50 países.

Información complementaria

El tercer borrador del paquete legislativo “Stop Soros” presentado al Parlamento está semana es el último de una serie de ataques contra los derechos humanos y el Estado de derecho en Hungría. Durante años, las autoridades han sometido a la sociedad civil a amenazas, campañas de desprestigio y represión.

Amnistía Internacional considera que Hungría viola sistemáticamente los principios fundamentales de la UE y que, por tanto, esta cuestión debería ser remitida al Consejo Europeo en virtud del artículo 7 del Tratado de la Unión Europea.

El Parlamento Europeo tiene previsto votar sobre un informe para incluir firmemente la cuestión de las violaciones de los derechos y las libertades fundamentales cometidas por Hungría en la agenda del Consejo Europeo. Amnistía Internacional insta a los miembros del Parlamento Europeo, y en particular al PPE, a apoyar plenamente este informe y garantizar su adopción.