Viernes, 16 de marzo, 2018
“La administración de Aceh no puede utilizar su autonomía para adoptar leyes y políticas que violen de manera flagrante los derechos humanos. Las autoridades tienen que centrarse en las causas básicas de la delincuencia, para que se entablen con elementos de juicio debates sobre la pena de muerte como violación de derechos humanos", declaró el director de Amnistía Internacional Indonesia, Usman Hamid
En respuesta a la noticia de que la administración provincial de Aceh, Indonesia, se está planteando introducir la pena de muerte por decapitación para sancionar el asesinato, el director de Amnistía Internacional Indonesia, Usman Hamid, ha manifestado:
“El gobierno local de Aceh debe abandonar de inmediato todo plan de introducir la atrocidad de la decapitación como método de ejecución y considerar mejor la posibilidad de renunciar por completo a la pena de muerte. El argumento de la administración de Aceh de que la decapitación puede prevenir el asesinato es infundado e inaceptable. Por impactante que sea el método de ejecución, no existen pruebas de que la pena de muerte tenga un efecto disuasorio especial frente a la delincuencia.
“La administración de Aceh no puede utilizar su autonomía para adoptar leyes y políticas que violen de manera flagrante los derechos humanos. Las autoridades tienen que centrarse en las causas básicas de la delincuencia, para que se entablen con elementos de juicio debates sobre la pena de muerte como violación de derechos humanos, y que proceder rápidamente a abolir esta forma extrema de pena cruel, inhumana y degradante.
“El gobierno central debe intervenir y pedir –u ordenar, si es preciso– a la administración de Aceh que abandone este plan. Aceh e Indonesia en su conjunto deben imponer de inmediato una suspensión de la pena de muerte con miras a su eventual abolición.”
Información complementaria
El pasado jueves, la administración de Aceh anunció que está considerando la posibilidad de introducir la pena de muerte por decapitación para sancionar el asesinato. Afirmó que esta forma de ejecución podría prevenir y reducir los asesinatos en la provincia. El gobierno local aseguró que este año va a llevar a cabo una investigación para sondear a la opinión pública de Aceh sobre el plan. Añadió que, si la mayor parte de la población de la provincia se muestra partidaria de ella, se aplicará la propuesta. El gobierno local explicó que quería seguir los pasos de varios países del mundo, como Arabia Saudí, que habían “reducido de manera efectiva el número de asesinatos” al poner en práctica la decapitación como método de ejecución.
La conservadora provincia de Aceh es conocida también por aplicar otras penas crueles, inhumanas y degradantes, que a menudo constituyen tortura, como la flagelación en público con vara a los jugadores y los adúlteros. El 17 de mayo, el Tribunal Islámico de Banda Aceh condenó a recibir 85 azotes cada uno a dos hombres detenidos el 28 de marzo de 2017 y acusados de relaciones homosexuales consentidas (liwath) en aplicación del Código Penal Islámico de Aceh. Los reglamentos islámicos están en vigor en Aceh desde que se promulgó la Ley de Autonomía Especial de la provincia en 2001 y son aplicados por los tribunales islámicos. Esta es la primera vez que se infligen en la provincia azotes con vara a hombres gays en virtud del derecho islámico. Las relaciones homosexuales consentidas no son consideradas delito en el Código Penal indonesio (KUHP).
Amnistía Internacional se opone a la pena de muerte en todos los casos sin excepción, con independencia del carácter o las circunstancias del delito, de las características y la culpabilidad o inocencia del acusado y del método utilizado por el Estado para llevar a cabo la ejecución. A día de hoy, 106 países han abolido la pena capital para todos los delitos y más de dos tercios de los países del mundo son abolicionistas en la ley o la práctica.