Miércoles, 02 de agosto, 2017
Amnistía Internacional ya ha documentado previamente malos tratos, tortura y ejecuciones extrajudiciales en las prisiones sirias.
En respuesta a la noticia de la ejecución, ocurrida hoy, del activista de derechos humanos sirio-palestino Bassel Khartabil, Anna Neistat, directora general de Investigación de Amnistía Internacional, ha manifestado:
“Lamentamos profundamente, y sentimos indignación, ante esta terrible noticia. Bassel Khartabil será siempre recordado como un símbolo de coraje, que luchó pacíficamente por la libertad hasta el final. Acompañamos en el sentimiento a su familia”.
“La muerte de Bassel Khartabil es un sombrío recordatorio de los horrores que tienen lugar a diario en las prisiones sirias. Las decenas de miles de personas encerradas actualmente en los centros de detención del gobierno sirio sufren tortura, malos tratos y ejecuciones extrajudiciales. Estos crueles actos constituyen sin lugar a dudas crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra.”
La familia de Bassel Khartabil anunció su muerte el 1 de agosto de 2017 tras recibir información según la cual a Bassel lo habían matado en 2015 tras haber sido presuntamente “juzgado” y “condenado a muerte” por el Tribunal Militar de Campaña de Al Qaboun, Damasco, en una vista celebrada en secreto. Estos tribunales son tristemente famosos por celebrar procedimientos a puerta cerrada que no cumplen las normas internacionales mínimas sobre juicios justos.
Bassel fue detenido el 15 de marzo de 2012 por el Servicio de Inteligencia del ejército sirio y estuvo recluido en régimen de incomunicación durante ocho meses antes de ser trasladado a la prisión de Adra en diciembre de 2012. Permaneció en Adra hasta el 3 de octubre de 2015, cuando consiguió informar a su familia de que lo trasladaban a un lugar no desvelado. Desde entonces se desconocía su paradero.
“Instamos al gobierno ruso a utilizar su influencia ante las autoridades sirias para poner fin a esta locura. Debe permitirse la presencia de observadores independientes en el interior de los lugares de detención de toda Siria, y que se lleve a cabo una investigación. Hay miles de vidas en peligro.”
Información complementaria
Bassel Khartabil nació y creció en el seno de una familia palestina en Siria. Trabajaba como desarrollador de software y era un destacado activista en favor de la libertad de expresión. Antes de su detención, utilizó sus conocimientos técnicos para ayudar a promover la libertad de expresión y el acceso a la información a través de Internet. Fue galardonado con numerosos premios, entre ellos el Premio Índice de Censura a la Libertad Digital de 2013 por utilizar la tecnología para promover una Internet abierta y libre, y fue nombrado por la revista Foreign Policy entre los 100 principales pensadores globales de 2012 “por insistir, contra viento y marea, en una revolución pacífica en Siria”.