Lunes, 27 de enero, 2020
pantin, Daniela
El 28 de enero se conmemora el Día Mundial de la Reducción de Emisiones de CO2, una oportunidad para concienciar acerca del efecto de la actividad humana sobre el ambiente, un impacto reflejado a través de la huella de carbono que ha intensificado el calentamiento terrestre
La huella de carbono es la forma que tenemos para saber cuántas emisiones de gases de efecto invernadero van asociadas a aquellos bienes o servicios que consumimos, desde la alimentación, la forma en la que vivimos, producimos y hasta cómo nos recreamos afecta directamente en el sobrecalentamiento del planeta.
De acuerdo a reportes del Panel Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC), el dióxido de carbono (CO2) es usado como medida internacional para medir el impacto de la huella de carbono, porque es el gas de efecto invernadero lo que más está afectando a nivel atmosférico y el que más hemos emitido.
Es evidente que la creciente emergencia climática podría magnificar las vulneraciones a los derechos humanos. El cambio climático amenaza con retroceder los últimos 50 años de progreso en el desarrollo, la salud global y la reducción de la pobreza.
Principalmente, el Cambio Climático se ha producido por:
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El desproporcionado aumento de gases de efecto invernadero por quema de combustibles fósiles (carbón y petróleo principalmente).
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La producción agropecuaria y el cambio de uso del suelo, en especial la deforestación.
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La industrialización y actuales patrones de consumo.
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La gestión de residuos sólidos y líquidos en los países desarrollados produce altos niveles de gases de efecto invernadero debido al consumo de energías relacionadas con los patrones de consumo y la gran producción industrial.
El calentamiento global es un hecho que continuará vulnerando los derechos humanos, comprometiendo los sistemas de salud, aumentando el riesgo de desnutrición dada la disminución de la producción de alimento, generando un mayor riesgo de contraer enfermedades transmitidas por alimentos y agua, a su vez, los fenómenos climáticos extremos generados por el calentamiento terrestre están destruyendo viviendas y obligando a muchas personas a desplazarse.
Todos los Estados tienen la obligación de proteger a las personas de los efectos nocivos de la crisis climática, incluido el desplazamiento. Por tanto, es fundamental que los gobiernos garanticen la protección social y la inversión en energías renovables producidas de forma responsable y fijar precios significativos a las emisiones para que las industrias contaminantes se responsabilicen.
Se subraya la importancia de este día dado que el cambio climático es una problemática que afecta a todo el planeta, la preocupación es de todos los países, es así que el Protocolo de Kyoto (2005) y el Acuerdo de París (2015), son convenios internacionales que intentan limitar globalmente las emisiones de gases de efecto invernadero.
El Protocolo de Kioto que entró en vigor en febrero de 2005 y forma parte de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), establecio diversos sistemas para reducir las emisiones de forma indirecta, como los Mecanismos de Desarrollo Limpio (MDL), uno de estos mecanismo es la conservación y mejora de los “sumideros de carbono” como son los bosques y océanos que retienen el CO2, de manera que su cuidado ayuda que parte de dicho Gases de Efecto Invernadero emitido no llegue a la atmósfera.
El Acuerdo de París adoptado en la XXI Conferencia Internacional sobre Cambio Climático (COP 21) en diciembre de 2015, presentó como objetivo central evitar que el incremento de la temperatura media terrestre supere los 2ºC respecto a los niveles preindustriales y busca además, promover esfuerzos adicionales que hagan posible que el calentamiento global no supere los 1,5ºC. Dichas medidas son de carácter jurídicamente vinculantes para los 175 países que se comprometieron a participar en las reducciones globales de gases de efecto invernadero.
Ahora, ¿qué podemos hacer nosotros?
El Calentamiento Terrestre es un problema que nos incumbe a todos y tomar acciones efectivas es un deber tanto de los Estados como de las empresas e instituciones y sobre todo de la ciudadanía, el cual podemos mitigar implementando algunas de las siguientes medidas:
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Apoyar el uso y desarrollo de energías limpias e incentivar un consumo más responsable de la misma.
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Desplazarse de forma sostenible, el transporte y su consumo de energía es otro de los grandes emisores de CO2. Utilizar transporte público, ir en bicicleta o a pie, siempre que sea posible y ayuda a reducir dichas emisiones.
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Aplicar las tres erres del ecologismo: reducir el consumo hasta lo imprescindible; reutilizar para aprovechar al máximo la vida útil de los productos y reciclar para aprovechar los materiales de los productos usados son también importantes contra el cambio climático.
¡No te quedes afuera y actúa de manera responsable por la Reducción de Emisiones de CO2!
Referencias:
https://www.un.org/es/sections/issues-depth/climate-change/index.html
https://www.ambientum.com/events/dia-mundial-reduccion-emisiones-co2
http://greengalley.blogspot.com/2018/01/28-de-enero-dia-mundial-por-la.html
https://www.sinergiaanimal.org/single-post/2019/08/01/calentamiento-global-derechos-humanos