Lunes, 17 de julio, 2017
Red de jóvenes, Red de jóvenes
La verdad es que el mundo se encuentra en constante cambio y nuestra percepción de la vida cambia con él; nuestro presente es distinto a ese en el cual crecieron nuestros padres y madres y, por supuesto, esperamos que aquel en el cual crezcan nuestras hijas e hijos también lo sea. Hay una cosa que está clara: nunca debemos retroceder.
Precisamente porque vivimos en un mundo distinto no podemos tolerar los mismos errores que se cometieron en el pasado, debemos ser conscientes de que hay que reclamar que dichos errores sean enmendados para garantizar que cada día sufran menos personas por culpa de políticas públicas retrógradas o incumplidas. Hay personas que lo saben y que, asumiendo las posibles represalias, reclaman el cumplimiento de sus derechos y los de las personas que, de la misma manera que a ellos, les están siendo vulnerados. Estas personas son defensoras de derechos humanos.
"...en muchos países, el Estado, o incluso la opinión pública, pueden considerar a los defensores de los derechos humanos equivocados por ver sólo una cara de la moneda. Por tanto, se les dice que no son “verdaderos” defensores. Asimismo, las autoridades estatales a menudo definen a las personas que actúan en defensa de los derechos de los presos políticos o de personas pertenecientes a grupos armados de la oposición como partidarios de esos partidos o grupos simplemente porque defienden sus derechos.
Esta posición no es correcta. Debe definirse y aceptarse a los defensores de los derechos humanos por los derechos que defienden y por su propio derecho a hacerlo."
Apartado sobre Defensores de DDHH según la relatoría de la ONU para Defensores de DDHH.
<<Actuar>> es una palabra clave; todas las personas tenemos opiniones acerca de lo que pasa en el mundo: Nos parece que algunas personas deberían estar haciendo las cosas con más atención o de una manera distinta a la cual siempre se han hecho.
Las personas que defienden los derechos humanos actúan.
La Declaración sobre las personas defensoras de derechos humanos hace referencia a ellas como “los individuos, los grupos y las instituciones [que contribuyen] a la eliminación efectiva de todas las violaciones de los derechos humanos y las libertades fundamentales de los pueblos y los individuos”.
Se reconoce su labor y su importancia para el desarrollo de la sociedad, son indispensables, pero en esta declaración no se hace mención de las consecuencias a las que estas personas se enfrentan por hacer lo correcto; por ponerle cara y voz al reclamo contra las situaciones de violación a derechos humanos.
Alrededor del mundo, 437 personas han perdido la vida entre 2015 y 1016 por defender derechos humanos; en Camboya, una joven fue acosada, detenida, golpeada y encarcelada por tratar defender a su comunidad de los desalojos forzosos de sus viviendas, en Turquía, activistas que trabajan por varios derechos están siendo juzgados como criminales; sin ir muy lejos, en Latinoamérica, hay prisioneros y prisioneras de conciencia que por el simple hecho de opinar distinto son perseguidos en "cacerías de brujas" con consecuencias para ellos, sus comunidades, sus amigos y sus familiares.
Lo irónico de este asunto es que las personas que son defensores de derechos humanos tienen una característica distinta otros tipos de luchas: lo hacen de manera pacífica y la verdad es que aunque quienes son valientes buscan hacer del mundo un lugar mejor, están siendo atacados por personas que quieren esconder sus errores en vez de trabajar junto a ellos para enmendar las fallas; es por eso que hoy, nos toca defender a quienes defienden.
Mil voces suenan más que una, un millón de cartas presiona más que dos y una organización de activistas por los Derechos humanos presente en más de 150 países y territorios puede ayudar a quienes hoy sufren por ser valientes; Amnistía no es más que esas personas pero sí puede apoyarlas, especialmente si contamos con tu apoyo.
Apoya la campaña #Valiente en favor de las defensoras y defensores de Derecho Humanos. Conoce más de nuestra labor y ayúdanos apoyando otros casos de esta y otras campañas entrando aquí.
Es nuestro deber, como jóvenes, tomar conciencia de lo que pasa alrededor del mundo, formarnos, promover el conocimiento y defensa de los DDHH, para que quienes se desempeñen como autoridades el día de mañana, no cometan los mismos errores que sus antecesores en pleno siglo XXI, haciendo de los abusos de la historia un ciclo repetitivo.
¡Actívate!
Por Sofía Rojas Ustáriz.