Lunes, 05 de junio, 2017
Rojas, Mildred
La ecologista Berta Cáceres, conocida líder ambientalista y cofundadora del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH), murió a tiros el 2 de marzo de 2016 en la localidad de La Esperanza provincia de Intibucá, en el oeste de Honduras. Durante años la activista de derechos humanos había hecho campaña enérgicamente contra la construcción de la represa de Agua Zarca en la comunidad de Río Blanco, la cual amenazaba al pueblo lenca, la mayor etnia indígena de Hondura. Desde su brutal asesinato, varios activistas medioambientales y de derechos humanos hondureños, algunos también del COPINH, han sido hostigados y amenazados.
A pesar de que en marzo de 2012, el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas decidió establecer un mandato sobre los derechos humanos y el medio ambiente que tiene como propósito, entre otras tareas, estudiar las obligaciones de derechos humanos relacionadas con el disfrute de un medio ambiente sin riesgos, limpio, saludable y sostenible, y promover las mejores prácticas relativas a la utilización de los derechos humanos en la formulación de políticas medio ambientales. Lamentablemente podemos observar como en los últimos años se ha venido deteriorando el ambiente, lo cual ha encendido una luz de alerta y atención con este fenómeno de degradación a todos los gobiernos de los países más desarrollados, ONG y sociedad civil organizada, tal es el caso de Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH).
La ecologista Berta Cáceres, conocida líder ambientalista y cofundadora del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH), murió a tiros el 2 de marzo de 2016 en la localidad de La Esperanza provincia de Intibucá, en el oeste de Honduras. Durante años la activista de derechos humanos había hecho campaña enérgicamente contra la construcción de la represa de Agua Zarca en la comunidad de Río Blanco, la cual amenazaba al pueblo lenca, la mayor etnia indígena de Hondura. Desde su brutal asesinato, varios activistas medioambientales y de derechos humanos hondureños, algunos también del COPINH, han sido hostigados y amenazados.
Los estudios de impacto ambiental y cultural, el acceso a la información, la consulta previa libre e informada, la violación al derecho a la demarcación, las decisiones unilaterales e impositivas generaron las condiciones para la campaña emprendida por Cáceres, debido al deterioro e impacto ambiental que van desde algunos procesos naturales hasta las diversas actividades humanas como la deforestación, la contaminación y la industrialización. A través de la misma y de su desaparición física se logró que el constructor más grande de represas a nivel mundial, la compañía de propiedad estatal china Sinohydro, retirara su participación en el proyecto hidroeléctrico. La Corporación Financiera Internacional, institución del Banco Mundial que invierte en el sector privado, también abandonó la iniciativa.
Las actividades humanas obedecen a que los gobiernos de los países subdesarrollados o en vías de desarrollo se preocupan más por sus problemas coyunturales, generalmente referentes a su economía y los procedimientos que emplean para explotar sus recursos naturales. El recurso agua no escapa a esta realidad, siendo éste uno de los más afectados en las últimas décadas, por tratarse de un recurso de alta vulnerabilidad. Como el tema que nos ocupa es la contaminación de las aguas, ésta puede discriminarse, según el tipo de relación que se dé entre las mismas y el uso por el hombre. De tal manera podemos clasificar a esa contaminación en: doméstica, agrícola, ganadera, industrial y recreativa, sumándose otros efectos como los llamados nuevos contaminantes, los accidentes ambientales y la sobre-explotación del recurso.
Las domésticas, a su vez, las clasificamos en urbanas y rurales. En las urbanas prevalecen los residuos que provienen de los vertidos de aguas cloacales y residuos domiciliarios. En las zonas rurales, la carencia de saneamiento y la provisión de agua potable individual, hace que la cercanía de estas fuentes, (pozos de agua y pozos ciegos) y su ineptitud, sea un foco importante de contaminación, con la consecuente aparición de enfermedades de origen hídrico. Es claro que a un determinado consumo de agua de origen doméstico, le corresponde el mismo volumen en desagües cloacales de la misma agua pero con sus características alteradas. El mejoramiento en la calidad de vida supone un incremento en el consumo de agua con el consiguiente aumento en las descargas, siendo cada vez más los contaminantes que se le agregan y más difícil su tratamiento.
En cuanto a las agrícolas, deben diferenciarse dos tipos: la intensiva, que generalmente se da en los cinturones urbanos, donde se producen principalmente hortalizas bajo cubierta y la extensiva, donde la contaminación se debe fundamentalmente a la utilización de agroquímicos y pesticidas, dependiendo el tenor de ésta de la cantidad que se utilice de los mismos. Otra forma de contaminación es la debida a la utilización de los métodos de riego que generalmente son de baja eficiencia, potenciando la salinización y degradación de suelos y aguas.
Respecto a las ganaderas, también se dividen en intensivas y extensivas; las primeras se dan en la cría de animales de granja o a corral siendo los principales contaminantes los que derivan de los desechos biogénicos.
Las industriales están relacionadas con la existencia de los parques industriales que concentran gran cantidad de industrias. Los contaminantes de éstas dependen básicamente del tipo de industria de que se trate y si tienen o no plantas de tratamiento.
La recreativa, es considerada también contaminante de los cuerpos de agua, en especial en los lagos donde se practica la navegación, y ésta se debe a derrames de los motores de las embarcaciones, o simplemente desechos de pequeños asentamientos poblacionales que se encuentran a la vera del cuerpo de agua, es decir es una contaminación predominantemente doméstica.
Nuevos contaminantes: dentro de esta gama podemos citar a los residuos hospitalarios, barros del tratamiento de líquidos cloacales, y los residuos radioactivos, principalmente utilizados en investigación y medicina nuclear.
Merecen un párrafo aparte las contaminaciones efectuadas por los llamados accidentes ambientales, que consisten generalmente en derrames de hidrocarburos, venenos o fugas producidas en reactores nucleares. La sobre-explotación del recurso agua como por ejemplo de las aguas subterráneas trae aparejada una mayor concentración de los elementos allí presentes; también puede suceder que se produzca la invasión de las napas por aguas salinas con el consiguiente deterioro de la reserva.
Debido a las distintas actividades humanas, se vierten hoy en ríos, lagos y acuíferos, grandes cantidades de contaminantes, los cuales alteran la calidad natural de las aguas, poniendo en alto riesgo el desarrollo de actividades como el abastecimiento de agua potable, el riego, la pesca y las actividades recreativas, con el consiguiente deterioro de la calidad de vida del hombre.
Por lo tanto la contaminación ha de verse como una de las principales formas de consumo de agua, ya que una vez contaminada, el agua no puede ser re-usada sin un tratamiento previo con el consiguiente aumento en su costo.
Es así como se ha puesto énfasis en frenar el deterioro ambiental, y para ello se han tomado medidas concretas, tales como requerir a los responsables de los emprendimientos económicos industriales estudios minuciosos de impacto ambiental, los que deben ser aprobados por las autoridades competentes a fin de que las empresas puedan llevar adelante los emprendimientos y además poder obtener beneficios crediticios para los mismos.
Es importante resaltar que “La investigación del asesinato de Berta, vergonzosamente deficiente y que hasta ahora no ha identificado a quienes ordenaron su muerte, así como la ausencia de un mecanismo eficaz para proteger a testigos y otros defensores y defensoras de los derechos humanos, muestra la falta de interés de las autoridades de Honduras en que se haga justicia. Y que cada día que pasa sin que se haga justicia acerca a los y las activistas medioambientales hondureños un paso más a un final trágico. No protegerlos es no proteger los recursos naturales de los que todo el mundo depende para subsistir.” Se teme que situaciones como estas se repitan en otros países a nivel mundial.
Diversas organizaciones indígenas del estado Bolívar y Amazonas en Venezuela han expresado que sus derechos han sido vulnerados con la aprobación del Decreto Arco Minero del Orinoco. Organizaciones de la sociedad civil, aliadas, intelectuales, académicas, políticas exigen el cumplimiento de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y los pactos internacionales en materia de derechos de pueblos y comunidades indígenas. Actualmente decenas de líderes, lideresas y miembros de comunidades indígenas, están siendo hostigados y coaccionados para incorporarse a este proyecto que afectará el medio ambiente, sus culturas ancestrales y su vida.
Fuente: Dirección Provincial de Recursos Hídricos - Consejo Agrario Provincial.
http://www2.medioambiente.gov.ar/sian/scruz/educacion/aguambie.htm
Bibliografía consultada:
* Custodio, E y Llamas,M. 1983. Hidrología Subterránea. Tomos 1 y 2. Edición Omega. Barcelona.
* Schulz, J. C. 1999. Agua y Medio Ambiente. COSYPRO. Santa Rosa - La Pampa.
Campaña de Amnistía Internacional Honduras:
Las lagunas judiciales existentes respecto al asesinato de Berta Cáceres son una advertencia para los activistas
¿Qué es COPINH?
https://www.copinh.org/copinh/quienes-somos
BBC MUNDO: El mortal costo de defender el medio ambiente en la Honduras de Berta Cáceres
http://www.bbc.com/mundo/noticias/2016/03/160307_honduras_defensores_ambientales_asesinados_ac.shtml