El conglomerado de 19 organizaciones se ha dado a la tarea de empoderar a la ciudadanía para que sea más consciente de sus derechos humanos, a través de la participación y programas de formación en pro del fortalecimiento del tejido social

En medio del complejo panorama que vive Venezuela a nivel político, social y económico, el Grupo Social Cesap (Centro al Servicio de la Acción Popular) ha asumido el reto de ser una mano amiga de las comunidades, cuyos derechos culturales, económicos y sociales se han visto vulnerados en los últimos años.

La organización cuenta 47 años de trayectoria y en la actualidad es una coalición de 19 organizaciones, esto les permite tener una cobertura nacional en diferentes temas, los cuales han surgido a través de la noble labor que ha venido desempeñado Cesap a lo largo de los años.

“El propósito fundamental de esta organización ha tenido que ver con impulsar la participación ciudadana y el fortalecimiento del tejido social y productivo en las comunidades, esa ha sido como la gran contribución a través de los años que ha hecho el grupo en términos de derechos, defensa y ejercicio de la participación, con el fin de poner ese asunto en el centro”, dijo Diana Vegas, presidenta del Grupo Social Cesap, durante entrevista para Amnistía Internacional Venezuela.

Vegas, señala que los últimos seis años la organización ha cambiado un poco su enfoque debido a la crisis que golpea a los venezolanos.

“Nos comenzamos a preguntar ¿cómo hacemos?, la gente en las comunidades se está muriendo. Entonces nos llevó a hacer una reingeniería institucional para brindar apoyo, porque el propósito de la asistencia humanitaria es salvar vidas, aunque no hemos dejado nuestra razón de ser que es la participación. También nos hemos sumergido a darle respuesta a la emergencia humanitaria compleja, específicamente al tema de la desnutrición, acceso al agua, protección de niños, niñas adolescentes y mujeres, y asistencia psicológica”, subrayó.

A su vez, la organización está orientada al desarrollo de medios de vida, enfoque que es el que más conecta con la esencia de Cesap. “Lo que nos interesa es tratar que esta asistencia humanitaria sirva como un mecanismo de fortalecimiento de capacidades a nivel local y no reproducir o aumentar el tema de la dependencia. Desde los primeros momentos nos preocupaba los esquemas de populismo a los cuales estamos acostumbrados en el país, entonces la idea no es que la asistencia humanitaria fuera un mecanismo para reforzar ese elemento que ha sido tan dañino y desmovilizador”.

Gestión de salud y vida

Bajo ese enfoque humanitario, Cesap se ha preocupado por brindar atención de salud a través de una serie de programas a niños de 0 a cinco años, mujeres embarazadas, lactantes y de la tercera edad, además de personas con discapacidad. De hecho, esta es la población que tiene prioridad para la organización.

“En principio tenemos todo un protocolo de cómo rescatar niños que están en estado de desnutrición severa, a través de un proceso de revisión, y también hacemos jornadas de salud para ese grupo vulnerable que tiene menos posibilidades de salir adelante”, destacó.

Además, agregó que lo más difícil de esta labor es que en algunos casos no pueden salvar vidas. “Enfrentarnos a la muerte ha sido dolorosísimo y el sufrimiento de la gente nos ha causado un profundo malestar, porque siempre nos aferramos a la esperanza que con estas acciones se puede salir adelante, pero ahora los problemas son más complejos”, relató. 

La Gente Propone

La organización también está orientada a lo que tiene que ver con la ciudadanía en defensa y protección de derechos humanos, por eso tienen el programa La Gente Propone, el cual es un observatorio ciudadano de políticas públicas a nivel municipal, con el objetivo de fomentar que las comunidades organizadas tengan una agenda de asuntos públicos, para que sea presentada ante las autoridades locales para que se comprometan a resolver los problemas.

“Más que un observatorio que documenta información, es un programa de activación ciudadanía organizada. En este sentido, para nosotros ha sido muy relevante y hemos logrado fomentar mesas de diálogo despolarizadas entre miembros de las comunidades y las autoridades locales”, explicó al respecto.

Además, Cesap a través de procesos formativos, han logrado que veedores comunitarios se constituyan como los garantes para hacer el seguimiento de los asuntos que son prioridad para la comunidad, sobre todo el colapso de los servicios públicos, con el fin de que sean atendidos con suficiente diligencia.

Este proyecto se ha puesto en marcha en medio de un contexto donde las alcaldías, que son las instancias más cercanas a los ciudadanos, se han visto disminuida, sobre todo en las zonas rurales al no contar con recursos, por lo tanto a través de dicha iniciativa se ha producido una interlocución, gracias a la disposición de la comunidad de querer forma parte de la solución de los problemas.

Aunque no se han resuelto todas las situaciones que quejan al país, la defensora asegura que en determinados sectores se ha logrado que una comunidad reciba agua después de mucho tiempo, se han recuperado espacios para el esparcimiento, y se ha atendido el tema de la basura al tener presencia en 12 municipios del país.

“Este es el proyecto que mejor recorre la misión de Cesap porque tiene el empoderamiento, organización y exigencia de derechos, y no de forma declarativa, sino tomando acción, porque en definitiva queremos que la gente mejore su calidad de vida y reivindique sus derechos”, enfatizó. 

Al ser el programa bandera de Cesap, la organización ya trabaja en otra versión llamada “Los Jóvenes Proponen”, que busca que la juventud se involucre en estos temas, aunque es todo un reto tras la fuerte migración que han protagonizado los jóvenes.

Economía productiva

En los últimos años, los venezolanos han tenido que enfrentar una profunda crisis económica, lo que ha llevado a los padres de familia a realizar diferentes trabajos para intentar subsistir, por lo tanto Cesap ha desarrollado una línea de acción al respecto.

“No puede haber mejoría de la calidad de vida de una comunidad si no se atiende el tema de los ingresos”, enfatizó.

Vegas subraya que en las comunidades hay emprendimientos que son claves para que se conviertan en un servicio y al mismo tiempo una fuente de ingresos para las familias.

“Ha sido un gran esfuerzo hacer trabajos de formación para hacer más sostenibles las iniciativas productivas porque en Venezuela hay personas audaces que se atreven a lanzar un negocio, pero al primer tropiezo el microempresario declina”.

En tal sentido, para la organización ha sido un gran desafío acompañar estas iniciativas para que sean sostenibles en el tiempo y puedan ser medios de sustento para familias que están en situación de precariedad, ante la ausencia de políticas económicas gubernamentales que recuperen el poder adquisitivo en los empleos formales.

Gestión de riesgo de desastres

Una de las situaciones que cada vez más se está siendo presente en la sociedad actual es el cambio climático, fenómeno que tiene un gran impacto en los derechos humanos, por lo tanto también Cesap tiene una incidencia en esta materia, para apoyar a las comunidades para adaptarse a condiciones adversas en el medio ambiente.

“Muchas veces las comunidades necesitan conocer mejor el territorio donde viven y tener conciencia de cuáles son los riesgos, además les brindamos formación para poder anticipar y prevenir desastres”, dijo la activista.

Bajo estas líneas de acción, durante 2021 Cesap ejecutó más de 200 proyectos a nivel nacional orientados a cumplir con los objetivos de desarrollo sostenibles, tales como:

• El fin de la pobreza
• Hambre cero
• Salud y bienestar
• Educación de calidad
• Igualdad de género
• Agua y saneamiento

Además, la organización se apega a tres principios fundamentales. El primero es el empoderamiento, el cual está estrechamente vinculado al tema de la formación, por lo tanto Cesap ha desarrollado diferentes iniciativas con distintas temáticas y énfasis.

“Siempre con la idea de que los líderes comunitarios puedan tener mayores herramientas y sobre todo porque queremos formar líderes transformadores que convoquen a la participación protagónica que está en la Constitución, que para nosotros es un referente real, porque queremos que la propia comunidad interprete que sus problemas pueden ser resueltos por ellos también asumiendo un rol activo”,  enfatizó.

Además, la organización hace énfasis en la visión de derechos humanos, al resaltar la importancia de que las comunidades sepan cuáles sus derechos y deberes, porque eso hace “tener a un ciudadano más empoderado”.

Mientras que el segundo principio tiene que ver con la protección a propósito de la crisis que afronta el país, a raíz de que el grupo de trabajo de Cesap documentó casos de niños y niñas que no solo estaban en estado de desnutrición, sino que también con signos físicos de maltrato.

“La crisis impacta de forma muy marcada a niños, niñas,  adolescentes y mujeres, entonces nuestros programas tienen elementos que se encargan de esos tópicos, porque muchas instituciones que debería tener el Estado están bastantes desmanteladas”, afirmó.

Como tercer principio, buscan la articulación para que las comunidades se vinculen como otros actores como el sector privado, las escuelas, iglesias, pero desde un accionar autónomo para lograr el respeto a los derechos humanos y se vele por el bien común de las mismas, y no por los intereses de un partido político.

Universidad Armando Janssens, un sueño hecho realidad

En 2018 el Grupo Social Cesap fundó la Universidad de Innovación Social Armando Janseens, proyecto que fue inspirado por la visión de uno de los principales fundadores de la organización (el padre Armando Janseens 1933-2018).

“Pretende profesionalizar a todo el trabajo comunitario y abrir las áreas de conocimiento que son específicas a las realidades locales, por ejemplo con el tema del agua nos damos cuenta que tenemos magníficos ingenieros formados en las universidades, quienes aún no han emigrado, y vemos que la formación ha sido para trabajar en una hidroeléctrica como El Guri, de pronto ubicarlos en realidades locales que son menos complejas pueden dar mejores respuestas”, destacó.

También, la universidad tiene como objetivo formar a miembros de otras ONG nacionales para potenciar la capacidad de desarrollar proyectos y manejar fondos de manera impecable.

¿Qué pasa con el papel del Estado venezolano, según Cesap?

“Nos hace falta un Estado garante. En todos los ámbitos tenemos unas leyes maravillosas; por ejemplo, les hemos enviado la ley de pueblos indígenas a otros países  y las personas han quedado sorprendidas, si vemos la emergencia humanitaria compleja en términos de las Naciones Unidas nos damos cuenta que uno de los elementos característicos es el debilitamiento de las instituciones del Estado y todo el marco de derechos, entonces hay un proceso gigantesco que hay que hacer, el cual tiene que ver con la formación ciudadana para hacernos más conscientes de nuestros derechos. Muchas veces nos toca decirles a las autoridades cuál es su papel, pero sin duda hay un desmantelamiento de la noción del Estado de derecho y nos tomará un tiempo volverlo a recuperar. Por otra parte, las organizaciones  no queremos suplantar al Estado, nuestro papel es hacer crecer la noción de que la ciudadanía es dueña de la sociedad”, concluyó.