Viernes, 26 de enero, 2018
“El vídeo que circula en las redes sociales parece una demostración de las terribles consecuencias de la impunidad desenfrenada que existe en Libia. Mientras los acusados de crímenes de guerra puedan seguir cometiendo graves violaciones del derecho internacional sin responder ante la justicia, las perspectivas de establecer el Estado de derecho en Libia seguirán siendo sombrías", declaró la directora de Amnistía Internacional para Oriente Medio y el Norte de África, Heba Morayef
En respuesta a la información de que, ayer, Mahmoud al-Werfalli, excomandante de campo de la Brigada de Fuerzas Especiales (Al Saiqa), adscrita al Ejército Nacional Libio, y presunto autor de crímenes de guerra buscado por la Corte Penal Internacional (CPI), ejecutó extrajudicialmente a 10 personas en Bengasi, la directora de Amnistía Internacional para Oriente Medio y el Norte de África, Heba Morayef, ha manifestado:
“El vídeo que circula en las redes sociales parece una demostración de las terribles consecuencias de la impunidad desenfrenada que existe en Libia. Mientras los acusados de crímenes de guerra puedan seguir cometiendo graves violaciones del derecho internacional sin responder ante la justicia, las perspectivas de establecer el Estado de derecho en Libia seguirán siendo sombrías.”
“La responsabilidad recae ahora en el comandante general del Ejército Nacional Libio, Khalifa Hafter, y en las autoridades libias, que deben garantizar que Mahmoud al-Werfalli es entregado a la CPI para dejar claro así que los responsables de crímenes de guerra y otras violaciones graves del derecho internacional serán llevados ante la justicia.”
Información complementaria
El 25 de enero aparecieron en las redes sociales unas imágenes de Mahmoud al-Werfalli en las que parece ejecutar extrajudicialmente a 10 personas. Se lo ve ante una fila de 10 hombres vestidos con monos azules, que están de rodillas, con los ojos vendados y con las manos atadas a la espalda.
Se aprecia entonces cómo pega a cada uno de ellos un sólo tiro en la cabeza y procede luego a disparar contra los cadáveres. Las imágenes parecen haber sido grabadas el 24 de enero en Bengasi, delante de la mezquita de Baiha Radwan. Este lugar fue escenario dos horas antes de dos atentados con vehículos bomba que, según medios de comunicación locales, mataron a 34 personas e hirieron a 71.
La CPI busca a Mahmoud al-Werfalli por crímenes de guerra. En agosto de 2017 dictó una orden de detención contra él.
Estas imágenes corresponden al último de una serie de vídeos que muestran a Al-Werfalli llevando a cabo ejecuciones extrajudiciales de cautivos desarmados e indefensos, cometidas en siete ocasiones distintas.