Lunes, 11 de septiembre, 2017

“La creación de este equipo de investigación es una oportunidad que no debe desaprovecharse para que Nigeria garantice la justicia a las víctimas de las incontables denuncias de crímenes de guerra cometidos por el ejército en el país”, ha manifestado Osai Ojigho, directora de Amnistía Internacional Nigeria.


El gobierno nigeriano debe garantizar que el equipo presidencial de investigación creado para investigar las violaciones de los derechos humanos perpetradas por el ejército de Nigeria es independiente, imparcial y eficaz, ha dicho hoy Amnistía Internacional.

A partir del lunes, el equipo “comprobará el cumplimiento por parte de las fuerzas armadas de sus obligaciones en materia de derechos humanos y de sus reglas de intervención, especialmente en situaciones de insurgencia y conflicto local”. Se ha pedido a partes interesadas, personas afectadas y al público en general que presente voluntariamente sus comunicaciones al equipo, cuyas sesiones comenzarán el 11 de septiembre de 2017.

“La creación de este equipo de investigación es una oportunidad que no debe desaprovecharse para que Nigeria garantice la justicia a las víctimas de las incontables denuncias de crímenes de guerra cometidos por el ejército en el país”, ha manifestado Osai Ojigho, directora de Amnistía Internacional Nigeria.

“Sin embargo, el equipo sólo podrá conseguir sus objetivos si se garantizan y se aplican las normas internacionales y unas buenas prácticas sobre investigaciones exhaustivas, eficaces, independientes e imparciales”, ha dicho Ojigho.

El equipo ha publicado sus términos de referencia, lo cual supone un primer paso para garantizar transparencia. Sin embargo, falta claridad respecto a su mandato, sus métodos de trabajo y el ámbito de sus investigaciones. El equipo también debe aclarar públicamente cuál será el procedimiento que se seguirá durante las sesiones, y si sus resultados se harán públicos.

En concreto, en los términos de referencia no figura ninguna medida concreta de protección a las víctimas y otros testigos que declararán o presentarán pruebas durante las sesiones.

“Para empezar, es fundamental que víctimas y testigos sean protegidos de posibles acosos, amenazas, malos tratos o represalias para garantizar que pueden presentar sus comunicaciones al equipo sin temor”, ha señalado Ojigho.

Amnistía Internacional ha presentado al equipo un memorando en el que describe los resultados de sus años de investigación que son pertinentes para las investigaciones.

La organización también ha pedido a las autoridades nigerianas que garanticen que el equipo cuenta con los recursos necesarios para facilitar su trabajo y proteger su independencia.

Esto incluye un apoyo económico adecuado, además de conocimientos especializados sobre investigación penal, análisis pericial, análisis jurídico, protección de testigos, asesoramiento sobre cuestiones de género y gestión de datos.

“Las responsabilidades del gobierno de Nigeria van más allá de la mera investigación de estas violaciones de derechos humanos: debe asegurarse de que en el mandato del equipo figura la formulación de recomendaciones para poner a disposición judicial a sus perpetradores”, ha dicho Osai Ojigho.

También es fundamental que —a diferencia de lo ocurrido en investigaciones anteriores— haga públicos sus resultados para garantizar una total transparencia y rendición de cuentas.

Información complementaria

Amnistía Internacional ha documentado violaciones y abusos graves y a gran escala cometidos por todas las partes en el conflicto armado no internacional del nordeste de Nigeria, así como violaciones de los derechos humanos en el resto del país, incluidos indicios de crímenes de guerra y posibles crímenes de lesa humanidad. La organización ha señalado a nueve altos mandos del ejército y ha pedido al gobierno de Nigeria que investigue su posible responsabilidad individual y en la cadena de mando. Amnistía Internacional publicó los resultados de sus investigaciones en sucesivos informes entre 2012 y 2016.

La organización ha publicado una detallada declaración pública en la que pide al gobierno de Nigeria y al equipo presidencial de investigación que aborde motivos de preocupación claves respecto al mandato y los métodos de trabajo del equipo.