HISVET FERNÁNDEZ: ACTIVISMO FEMINISTA Y LA LUCHA POR LOS DERECHOS DE LAS MUJERES MIGRANTES

Friday, March 07, 2025
Por: Damiano Daniela

Las organizaciones civiles son fundamentales para el empoderamiento femenino, ya que sus intereses están alineados con las necesidades reales de las mujeres, sin sesgos partidistas


Hisvet Fernández, psicóloga, feminista y activista venezolana de los Derechos Humanos Sexuales y Reproductivos (DHSR) de las mujeres, comparte su trayectoria y perspectivas sobre los desafíos que enfrentan las mujeres, especialmente las migrantes, en la actualidad, en entrevista para Amnistía Internacional Venezuela en el marco de las actividades que se promueven por el 8 de marzo, Día de la mujer.

La influencia de su madre, una mujer que defendía sus derechos, y de su padre, un intelectual que le inculcó la preocupación social, marcaron el inicio del camino de Hisvet en el activismo. Luego de sus estudios universitarios en Psicología, se especializó en la materia "Problemas socioculturales de la Sexualidad Humana" con la profesora Elisa Giménez, pionera de la lucha por los derechos de las mujeres en Venezuela.

“Trabaje con ella en la Maternidad Concepción Palacios, con mujeres parturientas de extractos humildes y me formé como Partera y Pedagoga de la Sexualidad y los Derechos de las Mujeres. Desde ese momento, me convertí en activista por los derechos humanos de las mujeres, haciendo mucho trabajo comunitario y docente”. 

Junto a Giménez, escribió un libro-folleto sobre Educación Sexual que marcó su vida profesional y personal. Se graduó en Psicología Social en la Universidad Central de Venezuela y realizó una Maestría en Desarrollo Integral de la Mujer en Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA) del estado Lara, donde fue docente y abrió cátedra de Sexualidad Humana desde nuevos paradigmas.

“Todos estos años he trabajado por ser voz pública de esta temática y activista de la democracia y los derechos de las mujeres, realizando trabajo político para el fortalecimientos de las mujeres como sujetas sociales de derecho”.

CECAVID: un espacio para el empoderamiento comunitario

La creación del Centro de Educación y Capacitación para la vida (CECAVID) en 1997 fue la materialización del compromiso de Hisvet con el empoderamiento de las comunidades populares. La organización se enfoca en brindar apoyo a jóvenes de ambos sexos, ofreciéndoles formación en oficios y autogestión de emprendimientos, así como herramientas para el crecimiento personal y el ejercicio de sus derechos humanos, sexuales y reproductivos.

"Nuestro primer Proyecto fue en Santa Rosa en Barquisimeto en la Comunidad de Santa Rosa y formamos jóvenes de ambos sexos en oficios y autogestión de sus emprendimientos, así como crecimiento personal y de sus derechos humanos, sexuales y reproductivos", detalla Hisvet.

CECAVID también ha desempeñado un papel fundamental en la articulación de organizaciones que luchan por los derechos de las mujeres, coordinando el Núcleo Lara del Observatorio Venezolano de los derechos humanos de las Mujeres, activo desde el 2005.

El papel de las organizaciones civiles feministas

Las organizaciones civiles, según su perspectiva, son fundamentales para el empoderamiento femenino, ya que sus intereses están alineados con las necesidades reales de las mujeres, sin sesgos partidistas.

"Son las Organizaciones civiles las que impulsan el verdadero empoderamiento femenino ya que son organizaciones de las mujeres y sus intereses son realmente las mujeres y no están alineadas con intereses partidistas o político-partidistas", subraya.

Se inspiran en ideales verdaderamente democráticos, igualitarios, sociales y de derechos humanos de las mujeres, donde la no discriminación de ningún tipo es la columna transversal de estas ONG.

Hisvet destaca la importancia de la "doble militancia" para las mujeres activistas: su compromiso principal debe ser con el feminismo y los derechos de las mujeres, pero también pueden participar en otras causas.

Mujeres migrantes: vulnerabilidad interseccional y desafíos 

La experiencia de Hisvet como psicóloga y activista le permite analizar la situación de las mujeres migrantes desde una perspectiva interseccional, considerando cómo el género, la raza, la clase y otras identidades se entrelazan para crear múltiples formas de vulnerabilidad.

"Estas categorías al estar interconectadas colocan al colectivo de las mujeres en múltiples vulnerabilidades simultáneas que las hacen estar en desventaja", explica. Es la articulación de las variables: Género, Clase, Etnia, Edad y otras lo que incrementa de manera significativa el riesgo de las mujeres como colectivo social y se agrava en situaciones de migración forzosa.

“Un ejemplo sencillo: no es igual migrar como; mujer, pobre y racializada, sin documentos vigentes que hacerlo como mujer, rica y blanca, por avión con visa vigente”

Hisvet señala que las mujeres migrantes enfrentan desafíos específicos, como la violencia de género, el trauma psicológico y la dificultad para acceder a servicios de apoyo de salud y psicológicos. Además, las políticas migratorias y las leyes de extranjería pueden exacerbar su vulnerabilidad, si no tienen en cuenta las necesidades particulares de las mujeres.

Desde una perspectiva feminista, describe los factores específicos que hacen que las mujeres migrantes sean particularmente vulnerables:

“Las mujeres siguen siendo vistas y tratadas como seres de segunda en cuanto al ejercicio de sus derechos civiles y políticos. Las representaciones psicosociales de las mujeres en el imaginario colectivo patriarcal siguen ubicando a las mujeres como personas débiles y carentes de derechos, autonomía y como objetos sexuales para los hombres. Además, las tareas de cuidados hacia sus familias y comunidades les agregan vulnerabilidad y coloca en riesgos permanentes. De diversas maneras, las mujeres migrantes son más vulnerables en toda su línea de vida”, explicó.

Es sabido que el trauma y la violencia de género afectan agresivamente la salud mental de las mujeres migrantes durante y después de su proceso de migración. Para Hisvet esto puede desencadenar graves daños a la autoestima de la mujer, su identidad y el acceso a recursos necesarios para poder avanzar en sus procesos migratorios.

Sin embargo, existe una deuda en programas de atención psicosocial para mujeres migrantes. “Hay mayor atención a problemas legales, vivienda, alimentación, salud física, transporte y no se atiende con igual importancia el mantenimiento y sostenimiento de la salud mental y psicosocial de las poblaciones migrantes y en especial de las mujeres migrantes. Que además se les considera como ´fuertes y resilientes´ como una generalidad de valor de género”.

Estrategias para el apoyo y la resiliencia: un enfoque integral

Para abordar estos desafíos, Hisvet propone un enfoque integral que combine estrategias individuales y colectivas. La formación de grupos de apoyo mutuo, el fortalecimiento de la autoestima y la promoción de los derechos sexuales y reproductivos son fundamentales para el empoderamiento de las mujeres migrantes.

"Trabajando la formación de grupos de mujeres migrantes de apoyo mutuo para crecer en su Empoderamiento desde susderechos humanos como mujeres, su autoestima, sus identidades y en especial sus derechos sexuales y reproductivos y el derecho a vivir libres de Violencias", enfatiza.

En cuanto a los enfoques terapéuticos, Hisvet recomienda el cognitivo conductual y el de derechos con perspectiva de género, con la sexualidad y su construcción integral como eje central.

La voz de Hisvet Fernández es un llamado a la acción, una invitación a la solidaridad y al compromiso con los derechos de las mujeres. Su experiencia y sus reflexiones nos recuerdan que la lucha por la igualdad de género es un camino que requiere la participación activa de todas las personas.

 

Sigue a CECAVID en sus redes sociales @Cecavid_vzla


Tags: Derechos de las mujeres, Violencia sexual, derechos sexuales y reproductivos, Defensores y defesoras de los derechos humanos, Derechos de migrantes, Migrantes y refugiados.

Share